Leopoldo Rivero, sacerdote, misionero en
Perú, ha compartido con los fieles de Hornachuelos su testimonio de misión, en
una tarde de convivencia y formación. Este jueves día 7 de noviembre, junto con los sacerdotes Tomás Pajuelo, Rafael Ochando y nuestro párroco Francisco José Delgado, celebró la Eucaristía a las siete de la tarde. Posteriormente, en el salón parroquial, aprovechando la hora de formación semanal de adultos, dirigió a los asistentes una charla
coloquio sobre su labor en Picota, en la diócesis de Moyobamba. En esa provincia en la selva de Perú la diócesis de Córdoba mantiene una misión. Dos sacerdotes atienden a más de cien parroquias, a algunas de las cuales no pueden ir nada más que una vez al año. Pero, según manifestó, en esas situaciones tan
precarias encuentran como las personas tienen hambre y sed de Dios, y dan testimonio de su fe. Y gracias a la labor de los animadores parroquiales, que dirigen las celebraciones y catequesis en ausencia de los sacerdotes se mantiene en esas comunidades la llama de una religiosidad viva y fructífera.
Se terminó con un animado coloquio en el que los sacerdotes fueron resolviendo dudas y respondiendo a preguntas de los participantes en esta charla formativa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario